«Dado que somos criaturas complejas, al menos debemos rodearnos de objetos sencillos, de lo contrario… ¡qué vida tan difícil!».

– Alberto Meda. 

Silla de oficina Physix de Vitra: la complejidad de lo sencillo.

Alberto Meda era ingeniero antes de ser diseñador. Es, por simplificarlo, un ingeriero que diseña. Y un ejemplo de lo que esto implica es la Silla de oficina Physix de Vitra. Ningún otro de los diseñadores que trabajan con Vitra está tan familiarizado con la tecnología y la construcción. Alberto Meda es el aliado ideal para simplificar tareas de diseño especialmente complejas en términos constructivos y creativos. Sus soluciones se caracterizan por su claridad y minimalismo visual. Y eso es la silla Physix.

El origen de este encargo fue diseñar una silla de oficina que siguiera la tradición iniciada por la Eames Aluminium Chair y que respondiera a las actuales necesidades de control ergonómico del movimiento del asiento y el respaldo.  La Aluminium es una silla que se caracteriza por el minimalismo y la claridad formal. Fue la primera silla en resolver con maestría la idea de una carcasa continua de tejido tensado entre dos largueros. Charles y Ray Eames lo resolvieron tan bien que a día de hoy la Aluminium Chair sigue siendo un icono del diseño de muebles. La idea, con la Physix era llevar este concepto un poco más allá y dotarlo de ergonomía.

Alberto Meda se cuestionó cómo seguir desarrollando un principio de diseño que permitiera crear un asiento cómodo pero estático y que, al mismo tiempo, ofreciera la máxima movilidad. Del mismo modo que hicieron Charles y Ray Eames en su época, estudió en profundidad las posibilidades que le ofrecían las técnicas y materiales modernos. Pronto entendió que utilizando un plástico flexible de alta calidad podría alcanzar la movilidad buscada. Del mismo modo, en Physix también hay un tejido tensado entre dos largueros, pero los largueros son de plástico y su perfil se ha diseñado de forma que se adapten con precisión a los movimientos del usuario. Por otro lado, como esta capacidad de deformación sería incontrolable sin una contrafuerza, dos barras curvas de aluminio transmiten las fuerzas de movimiento de los largueros laterales a unos resortes en espiral que hay debajo del asiento: esto garantiza una secuencia de movimiento controlada y regulable en función del peso del usuario.

El desarrollo del tejido para tensar entre los dos largueros también fue todo un reto. Finalmente, Meda y los desarrolladores de Vitra  encontraron la solución en un tejido de punto realizado con varios hilos, robusto pero translúcido, que fomenta la ligereza visual de Physix.

El resultado de todo este proceso es una silla que parece extremadamente sencilla y ligera, pero que es en realidad una obra de ingeniería. La Physix es una silla que se adapta perfectamente a entornos de oficina, pero también a espacios tipo home office en los que se busca huir de la estética de “silla de oficina” sin renunciar a la ergonomía y a la comodidad.

Si desear descubrir la Physix, probarla y descubrir todas sus posibilidades para tu proyecto, te invitamos a visitar nuestro showroom donde podrás conocer toda la colección de sillería de Vitra.