Teletrabajo: Cómo trabajar desde casa.

La crisis del Covid 19 ha generado una situación única en la historia. Los efectos de esta pandemia, y la crisis sanitaria desatada como consecuencia, son muchos y muy duros. Como todos, deseamos que esta situación termine lo antes posible y lo haga con las menores pérdidas humanas posibles, y que muy pronto podamos volver a estar disfrutando de nuestra vida diaria sin ningún tipo de limitaciones.

Una de las consecuencias de esta situación es, que de pronto, nos vemos pasando la mayor parte del tiempo dentro de nuestra casa. Para muchos, el teletrabajo se impone como una realidad, y la necesidad de ser lo más eficientes posible desde la distancia, nos hace implementar nuevas formas de comunicarnos con nuestros compañeros que hasta ahora conocíamos pero no utilizábamos.

Pese a todo lo duro de estos momentos, creemos que se puede sacar una lectura positiva de, al menos, esta parte de la situación. Creemos que gracias (o mejor dicho a pesar de)a la crisis del COVID-19, vamos a aprender nuevas formas de ejercer nuestras profesiones, a acelerar nuestros procesos de digitalización y trabajar de una forma más inteligente. Con horarios más flexibles, espacios adaptados a las distintas necesidades del trabajador, mayor conciliación de la vida personal y profesional, y un ambiente de trabajo mucho más adaptado a las posibilidades que hoy en día la tecnología pone a nuestro alcance.

Pero lo cierto es, que hasta el momento en que se puedan materializar todas estas reflexiones, muchos de nosotros nos hallamos trabajando, total o parcialmente, desde nuestras casas. Nuestros hogares se han tenido que convertir de un día para otro en una oficina improvisada. ¿Cómo trabajamos desde casa cuando nunca lo hemos hecho? Como decimos, esta realidad del teletrabajo  ha llegado de golpe, pero ya era una tendencia al alza antes de la crisis del Covid 19 y seguro que se consolidará a partir de ahora.

Por eso, hoy queremos compartir con vosotros algunas claves para que podáis ir configurando vuestra oficina en casa y podáis crear un entorno que os permita, pese a las circunstancias, poder trabajar con la mayor normalidad posible.

Claves para crear una oficina “improvisada” en casa:

• La ubicación. No todos tenemos la posibilidad de tener una habitación separada en casa destinada al trabajo. Puede ser que, incluso teniéndola, necesitemos estar en una zona que nos permita poder vigilar a los niños mientras trabajamos. En cualquier caso, hay dos elementos que, si nuestra vivienda nos lo permiten, no deben faltar: la ventilación y la luz natural. La falta de luz y de aire afectan directamente a nuestra productividad, y harán que nuestras jornadas de trabajo en casa se hagan mucho más pesadas. De hecho, pasar la mayor parte del día en una zona sin luz natural puede incluso, afectar a nuestro sueño y estado de ánimo de manera grave.

• Valora la naturaleza de tu trabajo o tus distintas necesidades. Si tu trabajo exige concentración prolongada o realización de videollamadas, vas a necesitar un lugar que te permita aislarte del resto de la vivienda. Si tu trabajo tiene una gran carga de creatividad, puede que necesites ubicarte en una zona cerca de tus libros o de aquellos elementos que te ayuden a tener una actitud más creativa. Siempre estaremos limitados por las características de nuestra vivienda, pero si antes de definir dónde ubicamos nuestra oficina nos paramos a pensar en qué necesitamos, seguro trabajaremos más cómodos.
• Dividir nuestra casa entre espacio, descanso y ocio. En estos días en los que toda la familia está forzada a pasar todo el tiempo en casa, este punto toma especial relevancia. Insistimos en que no todas las viviendas lo permiten, pero lo ideal es separar los espacios de ocio, descanso y trabajo. Incluso si vivimos solos, tener definidas las distintas áreas de nuestra casa nos ayudará a mantener cierta rutina y adaptarnos a nuestra nueva situación. Por ejemplo, si nos es posible, evitemos comer en el mismo lugar donde trabajamos, y si por la tarde dedicamos un rato al descanso y la lectura, intentemos también hacerlo en otra habitación y en una postura diferente a la que adoptamos para trabajar.

• La importancia de la silla. Que trabajemos desde casa no quiere decir que tengamos que hacerlo en una silla que no cumpla los básicos de ergonomía para cuidar de nuestra salud. Es importante que la silla en la que trabajemos nos permita estar cómodos durante horas, y lo que es más importante, mantener una postura adecuada. Que al menos sea regulable en altura, con reposabrazos, soporte lumbar y mecanismos que nos permitan adaptar la silla a nuestro cuerpo. Si no tenemos una silla de estas características, optemos al menos por una que tenga reposabrazos en caso de que tengamos que trabajar con ordenador, y que nos permita tener la espalda apoyada. Uno de los comentarios que siempre recibimos de nuestros clientes cuando buscan una silla de trabajo para su casa es que no quieren que parezca una silla de trabajo, sino un elemento “más amable” que se integre en el hogar. Entre nuestras favoritas para el home office se encuentran las sillas Physix, Pacific y la ID Trim de Vitra, o la Gas Swivel, de Stua.
• Organiza tu espacio. Es cierto que no resulta sencillo mantener el orden cuando nuestra casa está sometida a un uso tan intensivo como el que le damos estos días de confinamiento. Pero lo cierto es que mantener, al menos, nuestro espacio de trabajo ordenado es clave para ser eficientes y sobre todo, para trabajar a gusto. Contar con una mesa amplia y despejada, así como con elementos en los que guardar nuestros documentos o herramientas de trabajo es fundamental para que no se nos caiga la casa encima. Crear el hábito de recoger nuestras cosas una vez terminada la jornada de teletrabajo nos ayudará a mantener la productividad y la disciplina.
• Crea un espacio que te guste. Los seres humanos somos extremadamente sensibles a los espacios que nos rodean. El entorno afecta a nuestro estado de ánimo, y también a nuestra salud. Por eso, si bien es cierto que probablemente estos días tengamos otras cosas “más importantes” es la cabeza. merece la pena tomarse un tiempo para hacer que nuestro home office se convierta en un espacio que nos guste. Ubicar cerca de nuestro escritorio unas plantas o poner algún objeto especial para nosotros al alcance de la vista. Vamos a pasar muchos días en casa: dedicar un tiempo a redecorar los espacios puede incluso ser un pasatiempo entretenido que nos ayudará a sentirnos mejor.

Estos días, permanecer en casa no sólo es la mejor forma de proteger la salud individual y colectiva: también es una oportunidad para incrementar nuestra productividad, concentrarnos mejor y descubrir una nueva forma de trabajar de la que probablemente, aprenderemos cosas nuevas. La situación actual nos recuerda que lo más importante es centrarse en la familia, los amigos y el bienestar de todos, pero al mismo tiempo nos brinda una ocasión única para replantearnos nuestras rutinas y reorganizar el espacio que habitamos. Reconciliarnos o crear una nueva relación con nuestros hogares.

Desde Valoffice, estos días también trabajando desde casa, ponemos a tu disposición todo nuestro conocimiento en equipamiento de espacios y estamos disponibles para ayudarte a hacer tu entorno de trabajo en casa un poco más agradable. Puedes localizarnos tanto por email en valoffice@valoffice.com como en nuestro teléfono 961920694. 

No son días fáciles, y probablemente haya momentos en los que todo se nos haga cuesta arriba. Pero, si tenemos la inmensa suerte de que tanto nuestra salud como la de los nuestros esté bien, intentemos enfocarnos en las cosas positivas, en ver las oportunidades que esta situación nos plantea, en preguntarnos cómo podemos ayudar, cuál puede ser nuestro granito de arena.  Como decía Le Corbusier: “La casa debe ser el estuche de la vida, la máquina de felicidad.” Aprovechemos para disfrutar más que nunca de nuestros hogares. Cuidémonos y hagámoslo, sobre todo, por los que no se pueden quedar en casa.

Esto pasará.